Rihanna, nuestra queen Bad Gal RiRi, acaba de publicar su portada para el próximo Vogue británico.
Dentro de las decisiones de estilismo locas que suelen tomarse en una editorial de este tipo, porque, bueno, de alguna forma tiene que justificar su sueldo la peñufla del mundo de la moda, una de ellas ha sido esta:
Unas cejas finísimas pintadas a lápiz. Las medias tintas para otra. O todo o nada.
Rihanna se ha plantado (o la han plantado) en la portada de Vogue con unas cejas que ni la Greta Garbo. Y, claro, ha cundido el pánico.
We can NOT let thin eyebrows return I don’t care what queen Rihanna tries to subject us to. Resist pic.twitter.com/P9KZqFz4xx
— Taylor Lorenz (@TaylorLorenz) 31 de julio de 2018
No podemos permitir que las cejas finas vuelvan, me da igual que la reina Rihanna intente someternos, tenemos que resistir».
Esto es algo personal, hay gente que lleva 15 años intentando dejarse crecer el pelo de las cejas de vuelta.
Rihanna no🤣🤣🤣🤣🤣😭😭😭😭 we are still trying to fight this battle of eyebrows pic.twitter.com/cF6MIkkRvA
— Thandowethu.💛 (@ThandoJB) 31 de julio de 2018
«Rihanna, no, todavía estamos intentando librar esta batalla de cejas».
Algunas han querido apelar a la razón y decir que, aunque Rihanna lo haga no tenemos que ir todas detrás.
Let’s not make chola eyebrows a thing again just because Riri has thin ass eyebrows on her Vogue cover, K? K.
— Stef. (@SteppiDoll) 31 de julio de 2018
No dejemos que las cejas de chola vuelvan a ponerse de moda porque Rihanna tenga unas cejas finísimas en la portada de Vogue, ok?».
El miedo a que las cejas extrafinas vuelvan a ser tendencia no es infundado. Durante los últimos años básicamente todo lo que estuvo de moda durante los 90 y principios de los 2000 ha vuelto. Todo, menos una cosa: las cejas de hilo. Al menos así las llamábamos en mi instituto.
Las modas son cíclicas en general, y es habitual que la nueva tendencia sea radicalmente opuesta a la anterior. Todas recordamos el dramático cambio de pitillos a campanas, ¿verdad? Pues eso pasó de los 80 a los 90 con las cejas.
Ese es el problema con que haya “modas” con respecto a las cejas. Bueno, es un problema siempre y cuando lo que busquemos es llevar lo que más nos favorezca y lo que sea más práctico. Ni a todo el mundo le quedan bien las cejas de hilo, ni a todo el mundo le quedan bien las cejas de cm y medio de ancho y con un degradado que parece dibujado a rotulador.
Lo suyo (insisto, si lo que buscamos es elegir lo que más resalta el resto de rasgos de nuestra cara) es que un dejarnos aconsejar por un especialista el tema y respetar su forma natural todo lo posible. Justo lo que hace Bella Hadid, pero las publicaciones de moda se vuelven tan locas con cada pequeño detallito que hacen las famosas que si la mujer no va con las cejas pintadas como si tuviese dos boomerangs en la cara ya montan un numerito.
Todas las opciones son buenas, pero que no cunda el pánico, que Rihanna aparezca con las cejas pintadas a lápiz de una portada del Vogue no quiere decir nada más que eso: que Rihanna ha aparecido con las cejas pintadas a lápiz de una portada del Vogue.
Vía PlayGrund Magazine.
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