«Dentro de uno de los lugares más peligrosos de la Tierra para ser una mujer», asegura la cadena de televisión ABC.
En un interesante reportaje realizado por las periodistas Juju Chang, Jakie Jesko y Jenna Milman en mayo del 2017, muestra como la violencia contra la mujer es latente en Honduras, según cifras oficiales las mujeres siguen siendo hasta hoy las más vulnerables en este país.
Con el nombre, «Los hombres pueden hacer cualquier cosa con las mujeres en Honduras: Dentro de los lugares más peligrosos de la tierra para ser una mujer». El trabajo de estas periodistas muestra historias de las mujeres que han sido violentadas en nuestro país.
Violencia contra la mujer en los últimos años
El reportaje en uno de sus fragmentos afirma que: «La violencia es parte de la vida cotidiana en Honduras, uno de los triángulos de los países centroamericanos afectados por una guerra de pandillas desenfrenada, con algunas de las tasas de homicidios más altas fuera de una zona de guerra. Pero hay otra guerra brutal enfurecida allí, una oculta justo debajo de la superficie: Honduras ha sido llamado el lugar más peligroso de la tierra para ser una mujer.
Este ranking, debido en gran parte a una epidemia de «femicidio», o al asesinato de una mujer porque ella es una mujer. Según el Centro de Derechos de la Mujer de Honduras, una mujer es asesinada cada dieciséis horas en esta nación, que apenas tiene el tamaño de Ohio. Según la U.N., Honduras tiene la tasa de femicidio más alta del mundo.
Y es que según datos oficiales las muertes violentas han disminuido, sin embargo las muertes violentas de mujeres y femicidios van en aumento.
Por otra parte, el reportaje en un impactante fragmento destacó el testimonio de Heydi Hernandez, mujer que fue atacada por su pareja con un machete y cercenó sus extremidades.
Con demasiada frecuencia, la violencia proviene del propio hogar de una mujer. Heydi Hernández, una mujer de 30 años y madre de cinco hijos, vive con los recuerdos horribles y las cicatrices brutales de la noche en que su esposo la atacó con un machete después de una acalorada discusión. Ella dice que su hija mayor fue testigo mientras le cortaba los pies.
«Mis piernas estaban gravemente heridas». Recuerdo que una parte estaba unida por un trozo de piel «, dijo Hernández a la cadena de televisión ABC.
Ella piensa que fue el intento de su marido de afirmar su poder al robar su independencia. «[Si] él hubiera querido matarme, lo habría hecho», agregó.
Lea el articulo original en: ABC News.
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