-Muchos pueden considerar que cuando tienen entre 20 y 29 años, se pueden cometer locuras, vivir aventuras y tener proyectos en los que no importa si fracasa o no. Pero cuando se llega al “tercer piso” se debería empezar a tener mayores precauciones pues ya todo puede tener consecuencias mayores.
1. Malos hábitos con la tarjeta de crédito
Muy seguramente ha pensado toda la vida que la tarjeta de crédito es una forma para comprar. Error. Es contar con dinero que usted no tiene y, por lo tanto, que le quita valor e importancia a su presupuesto y a sus finanzas. Así, considere revaluar las cosas si mes a mes tiene que estar pagando la cuota, porque eso es un indicio de que está gastando más de lo que gana.
Según el portal Money de US News, lo importante es que usted comprenda la importancia de cargar con una deuda a cuestas, cómo manejarla y, especialmente, el riesgo que le puede implicar a futuro, en caso de que llegue a quedarse sin empleo o no tenga la forma para pagar.
2. Estáticos en lo financiero
Si es de quienes se ha quedado “estancado” solamente en su profesión y no ha buscado otras formas para poder ganar un dinero extra, debe hacer una evaluación de su futuro. Puede que actualmente esté ganando muy bien, con un sueldo que le permita hacer grandes sumas de ahorro, como puede que no considere importante tener otra fuente de dinero.
Esto, especialmente, cuando usted no ha considerado la opción de ser despedido o de tener una crisis económica que lo ponga a “apretarse el cinturón”. Si bien tener un ahorro es una buena alternativa, éste se puede acabar.
Piense, así sea, en algo pequeño y que no le demande mucho tiempo, que le resulte fácil y en el que pueda emplear sus habilidades. Considere alguna de estas alternativas que FP en esta nota.
3. En cuanto a los hijos…
Si ya es padre o madre, seguramente gran parte de sus ingresos se van directamente a darles gusto a ellos. La experta en finanzas, Suba Iyer, hace una reflexión al respecto en un blog del portal Get Rich Slowly, del tema: zapatos bonitos, juguetes entretenidos, ropa cómoda, herramientas educativas, entre otras cosas que, seguramente, no son una necesidad.
Como un ejercicio, de ahora en adelante guarde las facturas de todas las cosas que compra a sus hijos y, al final del mes, haga la suma. Realmente podría sorprenderse.
4. ¿Qué era eso de los seguros?
Ya es hora de empezar a empaparse “en eso de los seguros” y que ha ignorado durante tanto tiempo. Esto implica en reconocer que el futuro es incierto y que puede tener personas que dependan de usted o, incluso, que puede llegar a sufrir un accidente que limite sus posibilidades de trabajo.
Estar prevenido es mejor que lamentarse. Yahoo Finances destaca la importancia de pensar que, aunque no tenga arrugas, debe planificar las cosas que suceda a futuro. Y no solo se trata de un seguro de vida, sino también uno funerario, para su hogar o para sus bienes.
5. No pensar en su jubilación
A los 30 años aún está joven, es cierto. Pero es hora de considerar en un ahorro extra para que cuando llegue la tercera edad pueda seguir con una vida llena de comodidades, ¿no le gustaría? Eso implica en empezar a hablar de temas de pensión, de cotizaciones y otras cosas que quizá había estado evadiendo años atrás.
Por ejemplo, ¿ya ha revisado su historia laboral? ¿Sabe cuántos rendimientos le ha dado el ahorro en su fondo de pensiones? Es hora de empezar a saber qué significa esto porque, si se descuida, puede que en vez de estar ganando dinero lo esté perdiendo y sea momento de tomar decisiones.
6. Guardar apariencias
Aunque no les sucede a todos, muchos jóvenes se mantienen comprando lo último que sale en tecnología o de moda. Y es que entre más bienes se tenga o más dinero se gaste, pareciera mostrar que tiene más éxito. El portal de US News señala que adquirir este tipo de cosas no se consideran, necesariamente, un éxito financiero.
Y esto le puede estar implicando hacer compras innecesarias sólo por exponer en su Facebook o Instagram que tiene un muy buen trabajo o que es feliz con su vida. Así, el consejo de este portal es que no se ate a las posesiones materiales, sino que procure hacer un buen ahorro y cultivar su carrera profesional.
7. Comprar o mantener una casa que no puede
Yahoo Finances señala que aunque es una forma de crecer financieramente, si no cuenta con los recursos para mantener el pago de una hipoteca, no hay ningún problema en que siga viviendo en arriendo. Los expertos consultados por este portal web recomiendan que sólo deba considerar comprar una casa si está dispuesto a vivir en ella durante los próximos diez años y no hay riesgo de entrar en impago.
Cortesia
HRMH