La actriz estadounidense Lindsay Lohan fue condenada a otras 125 horas de trabajos comunitarios después de que un juez de Los Ángeles pusiera en duda el cumplimiento de su pena anterior.
El magistrado Mark A. Young señaló que «la corte no está dispuesta a aceptar todas las horas de servicio comunitario propuestas» ante las alegaciones presentadas por la fiscalía. Como consecuencia, amplió al 28 de mayo su libertad condicional.
La artista, de 28 años, fue sentenciada en marzo de 2013 a 240 de actividades al servicio de la comunidad por conducir de forma temeraria y mentir a la policía a raíz de un accidente de coche el 8 de junio de 2012 en Santa Mónica (oeste de Los Ángeles).
La exestrella de Disney afirmó que viajaba como copiloto cuando se estrelló el Porsche en el que viajaba, pero la investigación determinó que conducía el coche en el momento del accidente.
La justicia estadounidense también le impuso entonces permanecer 90 días ingresada en un centro de rehabilitación y seguir un tratamiento psiquiátrico durante 18 de los 24 meses de su libertad condicional.
Pero el fiscal adjunto de Santa Mónica, Terry White, aseguró el mes pasado en una vista preliminar que Lohan sólo se dedicó a saludar a los voluntarios con los que debía trabajar.
«Me encantaría pasar el día con una celebridad, pero eso no es servicio comunitario», apuntó el fiscal.
La abogada de la actriz, Shawn Holly, aseguró a la prensa que su clienta cumplió con la sentencia, pero no se opuso a la decisión del juez Young.
El 12 de marzo se celebrará una nueva audiencia para determinar las actividades que Lohan deberá cumplir.
Lohan se ha hecho más famosa por sus problemas con las drogas y su paso por la cárcel que por su trabajo. De niña inició una prometedora carrera en el cine tras protagonizar «The Parent Trap» y «Mean Girls».
-Sm