Personas de 64, 71 y de 80 años, nos demuestran que nunca es demasiado tarde para estudiar y aprender

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Costa Rica.- Cuando el deseo de superarse es mayor que el número de veces en las que se apagan las velas de cumpleaños, las metas se pueden cumplir, con mayor facilidad sin duda alguna.

Si no que lo diga doña Martha Moya. Esta vecina de Heredia, decidió a sus 60 y más años, empezar a cumplir un objetivo: ganar el bachillerato.

Doña Martha recién cumplió 65 años y ahora quiere aprender inglés.

Luego de tres años de perseverancia, logró en agosto anterior, con 64 años de edad, tener el título en sus manos.

Doña Martha tiene seis hijos, 13 nietos y está a la espera de su bisnieto número 13 y en este momento se prepara con libros en mano para empezar a estudiar inglés.

Ella asegura que la perseverancia fue la clave para cumplir su objetivo y a pesar que su familia, esposo, hijos, nietos y hermanas; siempre la apoyaron, hubo ocasiones en las que alguna que otra persona trató de echar abajo sus planes, sin embargo, fiel a su objetivo y lejos del desánimo, los comentarios la ayudaron a comprometerse aún más consigo misma.

“Mientras estamos activos no tenemos nada”

Doña Henriedde tiene 80 años de edad y nació en Suiza.

Doña Henriedde Ott tiene 80 años de edad, cuatro hijos, cuatro nietos y tres bisnietos, y desde hace cinco años asiste fielmente a las clases de Hidrokinesia en la Asociación Gerontológica Costarricense (Ageco), una vez a la semana.

Aunque doña Henriedde aprendió a nadar a los siete años, en este momento se mantiene activa y perfeccionando el deporte. Ella asegura que nunca se debe dejar de aprender y que “mientras estamos activos no nos pasa nada”.

Según ella, proponerse metas en edades avanzadas resulta aún mejor, ya que el compromiso es más grande.

Aprender a usar la tecnología

Don Johnny Wong es vecino de Tibás y tiene 71 años de edad, en este momento está en la clase de “Dispositivos inteligentes 2″, en Ageco.

“Empecé a estudiar porque me empezó a dar ‘vergüencilla’ y quise aprender”, dice don Johnny Wong.

Este profesional pensionado en Ciencias Económicas, dijo que si bien, la tecnología “lo aburre”, sabe que mantenerse activo es determinante para una mejor vejez.

“Yo llevo cinco cursos, ya he llevado anteriormente unos seis cursos más (…) Siempre había tenido interés de meterme, porque uno como pensionado debe invertir su tiempo en algo provechoso”, dijo Wong.

Dijo que lo que determina el aprendizaje es qué tanto se comprometa con el cometido.

Este pensionado dice que a su edad, es mucho más fácil estudiar, “yo siempre he tratado de usar más que todo la mente, no tanto la teconología (…) pero cuando uno deja de aprender, la mente se atrofia”, dijo Wong.

Cortesía.

GRamirez