Tribunal de Sentencia declara culpable a Teodoro Bonilla por tráfico de influencias

Radio América. Por unanimidad, la Sala III del Tribunal de Sentencia dictó la tarde de este viernes, un fallo condenatorio contra el ex vicepresidente del Consejo de la Judicatura, Teodoro Bonilla, por el delito de tráfico de influencias en perjuicio de la administración pública.

El Tribunal cambió además, medidas de arresto domiciliario a prisión preventiva al ex concejal.

El Ministerio Público informó en un comunicado que, el Tráfico de Influencias se consumó, por lo que la pena para Teodoro Bonilla se agrava de seis a nueve años de reclusión, más una pena de 200 a 300 mil lempiras.

La audiencia de individualización de la pena se realizará el próximo 21 de agosto.

Por esta misma causa criminal, la jueza Liz María Ernestina Núñez Cardona guarda Prisión Preventiva en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS) por los delitos de Prevaricato y Abuso de Autoridad.

Mientras, en el caso de Delmy Elizabeth López Paz, quien actualmente se desempeña como Magistrada de Corte de Apelaciones Civil de San Pedro Sula, se continúa a la espera que la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) resuelva la admisión del Antejuicio promovido en su contra por los delitos de Abuso de Autoridad y Tráfico de Influencias, en virtud de haber sido anulado por una circunstancia meramente formalista.

Sociedad Civil

Por su parte, el dirigente de la sociedad civil Omar Rivera considero como «ejemplar, historica y esperanzadora» la sentencia condenatoria en contra del ex concejal del Consejo de la Judicatura, Teodoro Bonilla.

«Nuestro reconocimiento va al Fiscal General del Estado y a su equipo de trabajo por estos tres años intensos de esfuerzos por revertir ese manto de impunidad que le ha dado protección a figuras conectadas a los grupos de poder político y económico del país» manifestó.

Rivera pidió que «se continúe con este decisión de ímpetu y valor por castigar a todos los que abusan de la autoridad delegada y el poder que les ha concedido la población; que quede esto como ejemplo para que ningún funcionario judicial trafique influencias y beneficie a sus familiares y socios».